Estimado señor director:
Me dirijo a usted para poner en su conocimiento que ya no podré formar parte de la obra. Simple y sencilla razón: he crecido.
Lamento los problemas que mi decisión le pueda ocasionar.
Quiero que sepa que este imprevisto surgió esta madrugada mientras dormía. No hay razón alguna que pueda encontrar para justificar semejante transformación. Si alguna explicación existe, realmente la ignoro. Sólo sé que hoy no pude vestirme ya que ninguna prenda me entraba. Intenté ponerme los zapatos que uso siempre pero fue inutil, hoy debo estar calzando cuatro números mas, no lo sé aún porque he permanecido descalza todo el día, todavía no revisé el guardarropas de mi madre a ver si puedo tomarle prestado algo de ropa, es que me cuesta moverme con la misma agilidad de antes, siento el cuerpo más pesado. Presiento que estaré pesando veinte kilos más. También me ha crecido el cabello, demasiado para mi gusto.
Estoy desconcertada como supongo estará usted al leer esta carta. En cuanto tenga más información se la haré llegar. Tal vez mañana todo vuelva a la normalidad, sería un milagro, algo muy poco probable, pero grandioso.
Sin más, lo saludo atentamente.
La niña
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Páginas
Desorden
Quiero un desorden con índice Dejar los zapatos en la retiracion de tapa de mi casa Subir las escaleras de impar a impar Abrir las ventanas...
-
"Soy un hombre sincero. No me gusta la mayonesa ni la mermelada de kiwi. Tengo para mí, que los buenos modales siguen ocupando el prime...
-
Quiero un desorden con índice Dejar los zapatos en la retiracion de tapa de mi casa Subir las escaleras de impar a impar Abrir las ventanas...
-
En el libro El arte de soñar, de Pilar Cansado, encontramos los tres pilares, valga la redundancia, de todo buen dormir. En primer lugar Pi...
1 comentario:
Sorprendente y maravillosa carta.
Tengo ganas de que siga la historia.
Publicar un comentario